martes, 23 de julio de 2013



LA EPISTEMOLOGIA POPULAR A PARTIR DEL ABORDAJE DE LOS JOVENES EN CONFLICTO CON LA LEY



INTRODUCCION
Cuando iniciamos nuestro proceso de vinculación social en la nueva poligonal, en la parroquia Francisco Ochoa, se hizo a partir de los objetivos que posee el proyecto nacional juventud y transformación. Este proyecto, nos plantea la necesidad de trabajar con una población determinada presente en la poligonal, la cual es al Joven en Conflicto con la Ley. En este sentido, se dio inicio a múltiples discusiones y reflexiones en torno a, lo que el enfoque tradicional denomina, nuestra unidad de análisis.
Discutiéndose por ejemplo, ¿Qué es ser joven?, ¿Cuál es la naturaleza o esencia del Ser a estudiar? Y ¿Cuáles son las diversas manifestaciones del Ser?, que, en referencia a nuestro interés transformacional, esta delimitado al fenómeno de Conflictividad con la Ley. Para esto nos fundamentamos en el rescate, y más allá, en la visibilizacion continua, de un sujeto que se observa continuamente y se transforma. Esto fundamentado en el paradigma de la complejidad, con la implementación del Enfoque-estrategia dada por la Investigación Acción Participativa (I.A.P). Para sustentar las razones por las que nos adscribimos a dicho paradigma, en primer lugar, definiremos lo que es paradigma realmente y luego, lo que entendemos por Paradigma de la complejidad.
Con relación a esto, iniciamos la reflexión entorno a la visión compleja del ser joven, transversalizando los objetivos del Proyecto Nacional Juventud Transformadora, los discentes de la unidad curricular Criminología de la II Cohorte del Programa Nacional de Formación Policial y algunos referentes teóricos, que nos permiten observar algunas perspectivas del fenómeno a comprender. Para todo esto, se procedió a obtener los documentos donde contemplan los objetivos del proyecto nacional y se seleccionaron las categorías de Joven, Representación Social y Construcción de Identidades como referentes teóricos.


ASPECTOS EPISTEMOLOGICOS DE LA INVESTIGACION
Cuando nos referimos a los aspectos epistemológicos que fundamentan esta investigación, tenemos que resaltar el enfoque planteado por Capra, cuando nos manifiesta el papel fundamental que juega el paradigma en la investigación científica, pero no solo determinando las bases sobre las que se construye todo el quehacer científico y sus resultados, sino que rige los principios y valores que determinaran el tipo de percepción que se tenga del entorno, esto es, la cultura, afectando el tipo de respuesta o acción que se llevara a cabo.
El autor define paradigma de la siguiente manera;
“una constelación de conceptos, valores, percepciones y practicas compartidas por una comunidad, que conforma una particular visión de la realidad que, a su vez, es la base del modo en que dicha comunidad se organiza… dicho paradigma consiste en una enquistada serie de ideas y valores…” (Capra; 2000: 17)

Si en nuestra lectura del texto antes citado, la Trama de la Vida, solo nos detuviéramos en la frase “… conceptos, valores, percepciones…”, “…ideas y valores…”, nos llevaría a pensar que la categoría de paradigma esta referida a la esfera metafísica, del mundo de las ideas, o lo que Bolívar en el Manifiesto de Cartagena denomino “… republicas aéreas.”, presentando, por supuesto, toda una serie de limitaciones que no corresponden con lo que seria el pensamiento dialectico y/o complejo.
Lo interesante es que para el autor, el paradigma, es una categoría que es construida intersubjetivamente, ampliando la visión del Paradigma Científico hacia el Paradigma Social. Esto, cuando nos muestra que están presentes practicas compartidas por una comunidad, en este caso, de científicos, pero que, de igual manera, repercute en la forma de organización social.
Todo esto, demostrando, que en la adquisición o adscripción a un paradigma científico, envuelve el compromiso por desarrollar una cultura, una manifestación objetiva, del tipo de organización social al cual dicho paradigma manifiesta. Es por esto, que cuando sostenemos que aceptamos la perspectiva que sostiene el paradigma de la complejidad, a partir de una andragogia critica, significa que pertenecemos a una comunidad científica determinada, que posee como proyecto de vida, es decir, como Ética, la construcción y visibilizacion de relaciones, interrelaciones e interacciones, que me permiten romper con lógicas de dominación.
Dichas lógicas son las que fundamentan mi accionar en el proceso de dominación sobre la voluntad, la vida del que podría denominar “el Otro-Yo”. Pero desde la visión compleja, construyo tejidos sociales de comunidad, de Común, de Solidaridad. Así lo sostiene Morin cuando nos define lo que según él es lo complejo.
“El conocimiento pertinente debe enfrentar la complejidad. Complexus significa lo que está tejido junto; en efecto, hay complejidad cuando son inseparables los elementos diferentes que constituyen un todo (como el económico, el político, el sociológico, el sicológico, el afectivo, el mitológico) y que existe un tejido interdependiente, interactivo e interretroactivo entre el objeto de conocimiento y su contexto, las partes y el todo, el todo y las partes, las partes entre ellas”. (Morín; 1999: 17)

Es por lo tanto importante resaltar, que nuestra premisa epistemológica, para el abordaje de la población etaria correspondiente entre 12 y 15 años, sea la del Joven mismo, la del sujeto involucrado en su propio proceso de diagnostico, de conocimiento y reconocimiento de si mismo, y de la transformación de los sentidos que se les atribuyen a sus propias vidas. Todo esto, no desde la visión Andragocentrica, en la que vemos a los jóvenes desde la propia mirada de los adultos, entendida como una visión tuteladora de las acciones y sentidos que los jóvenes deben llevar a acabo.
En el marco de la relación Positivista de Objeto-Sujeto, nos encontramos con toda una serie de políticas desarrolladas desde las instituciones del Estado, que deben ser aplicadas a los jóvenes, vistos estos, como objetos de la investigación a desarrollar y de las medidas políticas que deben ser implementadas. Lo evidenciamos cuando observamos proyectos y programas que bien estructurados con metas especificas de cantidades de jóvenes que tienen que estudiar nuevamente, que tienen que ser incluidos laboralmente, que tienen que estar en actividades deportivas y culturales, etc., sin realmente analizar cual a sido el proceso de construcción de las identidades que poseen los jóvenes, y todo esto a partir de sus propios relatos, de sus propias narraciones.
En este sentido, nos fundamentamos en la visualización del sujeto que se mira y se transforma, en el marco de una relación epistemológica “sujeto-sujeto”, en la que consideramos al propio joven como formante clave, sobre pasando la definición de informante clave, muy fundamentado en los textos de metodología.

Habiendo considerado al sujeto como la premisa fundamental del proceso de transformación, nos complementamos con la visión, que nos brinda la Investigación Acción Participativa, para esto tomaremos algunas notas del Colombiano, Orlando Fals Borda (1985),

“A este complejo proceso, que incluye la educación de adultos,el diagnóstico de las situaciones, el análisis crítico y lapráctica como fuentes de conocimiento para ahondar en losproblemas, necesidades y dimensiones de la realidad, lohemos denominado Investigación-Acción participativa, IAP. (pag.59)

Claramente, Fals Borda, expresa que el proceso que se inicia en una comunidad incluye, factores investigativos, como lo son; el descubrimiento de las condiciones de opresión que padecen esas comunidades y la denuncia de dichas condiciones, entendiendo todo esto como un proceso de formación colectiva, andragogia, educación popular; factores transformadores; a través del cambio en las relaciones de dominación por otras de solidaridad con el Otro-Yo; factores participativos; ya que se realiza siempre de la mano con las comunidades, siendo ellas las protagonistas y nosotros, los acompañantes de sus procesos.

 ASPECTOS TEORICOS DE LA INVESTIGACION

Cuando nos referimos al nivel teórico de esta investigación, es importante resaltar los aportes significativos a este campo, de la teoría de la representación social de S. Moscovici, Denise Jodelet; y del enfoque de la Construcción de Identidades, desarrollada a partir de Peter Berger y Thomas Luckmann, como los de Daniel Matos.
Es necesario llamar la atención, como son escasas las investigaciones realizadas a partir de estos enfoques teóricos, que nos permiten comprender desde el sujeto mismo, el joven, su proceso de construcción de identidad, cargada de percepciones y simbolizaciones, todas estas, les atribuyen sentidos a sus vidas, permitiendo con esto, la orientación de sus acciones, y el posicionamiento de herramientas con las que abordar la conflictividad social.
De igual manera, son escasos los estudios desarrollados sobre los jóvenes, desde el enfoque del joven, y no desde la perspectiva de la criminología, en el que a criminalizado a esos grupos etarios, y desde la psicopedagogía. Conviene además resaltar que la población Venezolana es considerada como una población joven, y que no es sino a partir de la llegada del presidente Hugo Chávez al Poder, en el que progresivamente los jóvenes vienen ocupando un papel importante en la sociedad Venezolana.
Cuando nos referimos a la representación social, observamos que:
“… es un corpus organizado de conocimientos y una de las actividades psíquicas gracias a las cuales los hombres hacen inteligible la realidad física y social, se integran en un grupo o en una relación cotidiana de intercambios, liberan los poderes de sus imaginación”. (Moscovici, 1979; 17-18)

No nos referimos aquí a opiniones o ciertas formas de comportamientos, sino como lo establece el autor, a cuerpos de organización de conocimiento, a un conocimiento del sentido común, de la vida cotidiana, que se a internalizado a tal punto que se constituye en elemento clave para la construcción de identidades. Es por ello, que se hace necesario propiciar procesos de comprensión de la manera como los jóvenes construyen los sentidos, las lógicas de conocimiento, que le permiten a su vez, determinar lo que para ellos “sea algo”, es decir, la definición de lo que es ser joven, y como es el comportamiento apropiado para su definición de joven, permitiéndole organizar su mundo de vida a partir de percepciones y referentes simbólicos que han consumido cultural y materialmente. 

Jodelet propone la siguiente definición de representación social:
“El concepto de representación social designa una forma de conocimiento específico, el saber de sentido común, cuyos contenidos manifiestan la operación de procesos generativos y funcionales socialmente caracterizados. (…) Las representaciones sociales constituyen modalidades de pensamiento práctico orientados hacia la comunicación, la comprensión y el dominio del entorno social, material e ideal. En tanto que tales, presentan características específicas a nivel de organización de los contenidos, las operaciones mentales y la lógica”. (Jodelet, 1986; 470-471)

Siendo la representación social una condensación de significados que permite caracterizar la realidad, jerarquizar los esquemas de información del entorno, y organizar las acciones que se llevaran acabo en el marco de las relaciones intersubjetivas. Las investigaciones que se realizaran desde la Universidad Nacional Experimental de la Seguridad, tendrán que romper con el cerco Andragocentrica y tuteladora, para analizar el campo de significados del propio joven, para luego entender las diversas manifestaciones del joven, entre ellas las que el Estado a catalogado como “violentas”, que obedecen a formas de ver el mundo y organizarlo. Es todo un trabajo de descubrimiento de epistemologías populares.
Tal y como lo sostiene el mismo Mato las representaciones sociales son “enunciados verbales, imágenes, o cualquier otras formulaciones sintéticas de sentido descriptibles y diferenciables, producidas por actores sociales como formas de percepción o simbolización de aspectos claves de la experiencia social”. (1999:153). Ya que representan formas y contenidos de discursos, esto es, de maneras de hablar, de códigos que se utilizan en la comunicación, etc., a través de grafitis en las paredes, deterioro de espacios públicos como mecanismo de apropiación ante la privatización simbólicas de los espacios públicos.
Siendo para Matos la construcción de identidad como la construcción de representaciones de identidad, que les van a permitir establecer líneas o fronteras simbólicas entre los idénticos y los diferentes, y entender la lógica del diferente como una lógica a la cual no se puede doblegar, generando continuas resistencias, es por esto que el Estado debe, con sus instituciones destinadas al trabajo con este sector, no acercarse a los jóvenes con las mismas intenciones que tenia Cristóbal Colon hacia nuestros aborígenes, con intenciones de domesticarlos y adiestrarlos ideológicamente, ya que conseguirán fuertes resistencias.
Los cambios no se decretan. Se permiten los procesos de construcción de nuevas lógicas de vida, de nuevos significados que rompen con las relaciones de dominación de una clase sobre otra, de un sexo sobre otro, de un grupo etario sobre otro.

CONCLUSION

Para cerrar este artículo o más bien para dejarlo abierto, ya que representa premisas sobre las que se fundamenta nuestro proceso de vinculación social en la nueva poligonal del estado Zulia, es imperioso que rescatemos la visión dialéctica del mundo social, en el que confluyen factores socio-estructurales, como también, por supuesto, factores socio-simbólicos. En este sentido, buscaremos las implicaciones de los factores generadores de violencia, sustentados en el articulo 5 de la Ley Orgánica del servicio de policía y cuerpo de policía nacional, pero de igual manera, se implementaran estrategias metodológicas que nos permitan comprender el mundo de vida de los jóvenes que pertenecen a la parroquia Francisco Ochoa, municipio San Francisco estado Zulia.  


REFERENTES BIBLIOGRAFICOS


  • ·         Capra, Fritjof. 2000. La trama de la vida. Barcelona: anagrama.
  • ·         Fals Borda, Orlando. 1985. Conocimiento y poder popular. Organización Internacional del Trabajo.
  • ·         JODELET, Denise. La representación social: fenómeno, concepto y teoría. En Moscovici, Serge. Psicología Social II. Pensamiento y vida social. Psicología social y problemas sociales. Barcelona. Paidós. 1986. Pág. 470-471.
  • ·         Mato, Daniel (1999). “Globalización, representaciones sociales y transformaciones sociopolíticas”. En Rev. Nueva Sociedad Nº 163, Caracas, Septiembre-Octubre.1999. Págs. 152-163.
  • ·         Morín, Edgar. 1999. Los siete saberes necesarios para la educación del futuro. UNESCO.
  • ·         Morin, Edgar. 2004.LA EPISTEMOLOGÍA DE LA COMPLEJIDAD. Documento electrónico:www.pensamientocomplejo.com.ar/ , consultado el 19-02-2013.
  • ·         Moscovici, Serge. 1979. El psicoanálisis, su imagen y su público. Buenos Aires: Huemul.